Las intenciones de misas llegan durante la pandemia como la ayuda del buen samaritano
En muchas parroquias del mundo existe una gran pobreza, por lo que los fieles no están en condiciones de mantener económicamente a sus sacerdotes. En esos lugares, los estipendios de misas son a menudo la única fuente de ingresos de los sacerdotes. En 2019, ACN pudo ayudar a más de 40.000 sacerdotes de todo el mundo con estipendios de misas. Durante la pandemia del Covid-19, esta ayuda se hace aún más significativa, como ha podido saber ACN a través de las cartas de agradecimiento de sus socios en proyectos.
India es uno de los países más afectados por la pandemia. Una alta densidad de población, unida a una atención sanitaria frecuentemente insuficiente, favorece la propagación del virus. Por esto, el clero de este subcontinente está especialmente agradecido por la ayuda recibida; por ejemplo, el hermano Ignacio, superior general de los Heraldos de la Buena Nueva en la provincia de Andhra Pradesh en el sureste de India, una sociedad misionera católica fundada en 1984, escribe: «Durante la pandemia del Covid-19, nuestros sacerdotes se ocupan de hacer muchas obras caritativas. Atienden a muchos trabajadores migrantes y van a las aldeas para distribuir alimentos y demás artículos de primera necesidad a los pobres que sufren gravemente debido a un confinamiento de cinco meses. Hay muchas familias que han perdido el trabajo y no cuentan con ningún medio de subsistencia, para estas personas la ayuda y la mano amiga de nuestros sacerdotes llegan como la ayuda del buen samaritano. Su ayuda las intenciones de misas para nuestros sacerdotes, son también como la ayuda del buen samaritano. El Dios misericordioso que todo lo ve desde arriba, los bendecirá y recompensará de otros modos».
El padre Amalan, uno de los 250 sacerdotes que han recibido estipendios de misa en la diócesis de Tuticorin, en el sur de la India, también quiere expresar su gratitud: «Los feligreses de esta parroquia son jornaleros muy pobres, por lo que rara vez recibo estipendios para celebrar misa. Pero en los últimos cuatro meses, debido a la pandemia de Covid-19, ni pudieron ir a trabajar ni se han podido celebrar las misas, por lo tanto, no recibo ningún estipendio y me es muy difícil cubrir mis necesidades. En esta situación, sus estipendios de misas han sido muy útiles para poder continuar mi vida cotidiana. Una vez más, le agradezco la generosidad con la que están ayudando a nuestros sacerdotes diocesanos y espero que sigan haciéndolo en el futuro».
De África proceden también muchas cartas de agradecimiento a ACN, por ejemplo una del hermano Henry Saileri Mauawa, de Malawi, que es profesor en la escuela St. Kizito. Sin embargo, actualmente no puede dar clase: «Las escuelas de Malawi se cerraron el 23 de marzo de 2020 debido al brote del virus. El cierre de la escuela es un duro golpe ya que ha supuesto el fin de la pequeña ayuda con que contamos los sacerdotes que trabajamos en la escuela. […] Escribo esta carta para expresar mi gratitud por su amable y oportuno gesto de apoyo a mi misión como sacerdote al proporcionarme estipendios de misas».
Thomas Heine-Geldern, presidente ejecutivo de ACN, expresa su agradecimiento a todos los que han hecho posible esta ayuda: «Estoy muy agradecido a nuestros benefactores, que a menudo tienden la mano a sus prójimos cristianos a pesar de su propio sufrimiento y angustia. Es un hermoso gesto que ayuda a mantener viva la fe».