Haití: “Nos encontramos aún en la primera fase de ayuda de emergencia”
La imposibilidad de viajar al país por la actual inseguridad impide avanzar más rápido en las ayudas
El terremoto del 14 de agosto de 2021 en Haití ha dejado al país en una situación de extrema pobreza. Además, tras el asesinato del presidente el pasado mes de julio, la inseguridad ha empeorado. En una entrevista con Ayuda a la Iglesia que Sufre (ACN), Rafael D’Aqui, jefe de proyectos para América Latina en ACN, explica la situación actual del país y los retos que presenta para la fundación pontificia, que aprobó de inmediato proyectos de ayuda de emergencia.
¿Cómo ha evolucionado la situación en Haití desde el terremoto?
La situación después del terremoto sigue siendo difícil: en algunas zonas la gente duerme al raso o en tiendas, los sacerdotes en casas de los fieles o en los coches. Hay escasez de agua, electricidad, comida, ropa, medicinas… Gran parte de la población está traumatizada. Una gran cantidad de edificios de la Iglesia y estructuras de las diócesis están parcial o incluso totalmente dañados. Aproximadamente 70 parroquias necesitan tiendas de campaña para poder realizar su labor. Además, hay inseguridad y violencia, lo que dificulta una ayuda efectiva.
¿Cuál era la situación antes del terremoto?
Desde hace unos 2-3 años el país vive una situación de inseguridad. Diversas bandas controlan las ciudades y carreteras produciéndose robos y secuestros a la población, asaltos a camiones, etc. Esta situación de inseguridad empeoró tras el asesinato del presidente en su propia casa a principios de julio. Además, el país ya sufría la falta de lluvia y agua, así como de una pobreza extrema, especialmente en las zonas rurales.
¿Cómo trabaja Ayuda a la Iglesia que Sufre (ACN) sobre el terreno? ¿Qué impacto ha tenido esa ayuda?
En un primer lugar, ACN solicitó a las diócesis afectadas un inventario de la situación y los daños para poder hacer una propuesta de ayuda adecuada. Tras ello, ha reservado un presupuesto de emergencia para los proyectos de Haití. En la diócesis de Jérémie se han aprobado ya un total de $134.400 para ayuda de emergencia (tiendas de campaña, alimentación, agua potable, medicinas, etc.) en 16 parroquias.
¿Qué trabajo le queda todavía por hacer a ACN en Haití?
Actualmente nos encontramos aún en la primera fase, la ayuda de emergencia. A su vez estamos trabajando para definir una estrategia para la segunda fase, que incluirá la reconstrucción. Esto lo llevaremos a cabo junto con otras organizaciones eclesiales que han manifestado su deseo de colaborar en la reconstrucción del país.
Es la tercera vez que ACN y dichas organizaciones trabajaremos en conjunto, como ya hicimos después del terremoto de 2010 y el huracán de 2016. Esta segunda fase requerirá una evaluación técnica de los daños y una selección de los edificios a reconstruir con prioridad, por lo que su ejecución llevará ciertos meses. Estamos estudiando también la posibilidad de apoyar proyectos destinados a la sanación, desde la fe, de las heridas y traumas generados por la grave situación, porque tenemos que ayudar a la gente a recuperar la esperanza.
¿Cuáles son los mayores obstáculos en su trabajo?
Por un lado, la imposibilidad de viajar al país por la actual inseguridad impide poder conocer la situación de primera mano y reduce la comunicación a medios online o telefónico. Por otro lado, es un reto poder tener una evaluación completa de los daños en los edificios en un tiempo corto, así como también es un reto gestionar una pronta reconstrucción de los edificios ya que se debe asegurar el cumplimiento de la normativa antisísmica y anticiclónica y la disponibilidad de materiales que actualmente vienen del exterior debido a la escasez a nivel local.
¿Cómo continuará la labor de Ayuda a la Iglesia que Sufre ?
ACN continuará apoyando como pueda desde la oración y la solidaridad a la Iglesia en Haití y a su gente. Desde hace años sentimos con este pueblo que sufre pobreza y abandono, inestabilidad y violencia, y que encuentra en la fe y en la labor de las religiosas, sacerdotes y agentes pastorales un apoyo inigualable y en estos momentos imprescindible.
La fundación ACN tiene actualmente más de treinta proyectos para apoyar la labor de la Iglesia en Haití. Entre otros acaba de aprobar ayuda de emergencia para la distribución de carpas, alimentos, agua potable y medicinas; así como ayudas para las obras de reparación más urgentes de diez casas parroquiales de la diócesis de Jérémie para asegurar la coordinación de la labor social y pastoral de las parroquias tras el terremoto del 14 de agosto de 2021 en la diócesis.