Se celebra una Misa Ordinaria por tu intención particular.
Ofrecer una Misa por el alma de un ser querido difunto es uno de los gestos más significativos de amor y ayuda espiritual. Al pedir Misas por los difuntos, podemos contribuir a aliviar sus penas, facilitar su liberación del purgatorio y guiarlo hacia la felicidad eterna en el cielo.
El estipendio asociado a la Misa permite a los benefactores no solo participar en la celebración de la Eucaristía, sino también apoyar a sacerdotes perseguidos por su fe y también a sacerdotes que se encuentran en zonas de mucha necesidad y asi apoyar sus diversas actividades pastorales. Esta ofrenda refleja nuestra fe en la mediación de la Iglesia.
Muchos benefactores optan por encargar Misas mensuales durante un año completo en memoria de su ser querido. Otros prefieren solicitar una Misa en fechas significativas como el aniversario de fallecimiento, cumpleaños, aniversario de bodas u otros momentos importantes en la vida del difunto. Cada Misa es un acto de fe y esperanza, una manera poderosa de mantener viva la memoria de nuestros seres queridos y encomendar su alma al amor y misericordia de Dios.
Con este estipendio de Misa darás sustento a sacerdotes muy necesitados en el mundo. En 2023 se celebraron un total de 1.744.410 Misas a petición de nuestros benefactores, lo que nos permitió apoyar económicamente a un total de 40.767 sacerdotes –en promedio, uno de cada diez en todo el mundo–. Esto significa que ellos celebran más de 4.780 Misas diarias, uno de ellos celebrará la(s) Eucaristía(s) por tus intenciones.
La mayoría de sacerdotes no solo emplean los estipendios de Misas para su propia manutención, sino también para cubrir parte de los gastos derivados de su actividad pastoral. Con ello, los estipendios de Misas garantizan el sustento inmediato de los sacerdotes y de sus parroquias.