Secar las lágrimas donde Dios llora

«Ya no hay miedo, sólo el deseo de servir»

La archidiócesis de Ivano-Frankivsk, en el oeste de Ucrania, empezó a acoger a mujeres y niños que huían desde el principio de la guerra. La mayoría de los refugiados proceden de grandes ciudades como Kiev, Járkov, Zaporiyia, Dnipró y Odesa. Una de ellas es Sofía. Tiene 14 años. Junto con su madre, Viktoria, huyó de […]